Chilpancingo, Gro., 22 de mayo de 2024.- El Congreso del Estado aprobó reformas y adiciones a la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia del Estado de Guerrero para incorporar y reconocer la violencia reproductiva y la violencia política por razones de género.
En el dictamen que emitió la Comisión para la Igualdad de Género, derivada de dos iniciativas propuestas por la diputada Leticia Mosso Hernández, se señala que estas reformas tienen el objetivo de contribuir a erradicar todas las formas y expresiones de violencia que dañan y afectan a las mujeres y que contribuyen a una violación de los derechos humanos y las libertades fundamentales, salvaguardando en todo momento la dignidad humana y el respeto a sus derechos.
Y es que, refiere, la violencia reproductiva es un tipo de violencia que casi no es visible, pero que afecta a un gran número de mujeres, siendo las manifestaciones más claras la subordinación y desigualdad en las relaciones de poder entre hombres y mujeres.
Agrega que los derechos de las mujeres también incluyen el derecho a tener el control sobre las cuestiones relativas a su sexualidad, incluidas su salud sexual y reproductiva, y a decidir libremente sobre éstas, sin verse sujetas a la coerción, la discriminación y la violencia.
“La violencia reproductiva implica un patrón o una serie de comportamientos que una pareja abusiva puede utilizar para mantener el poder y el control sobre la salud reproductiva de su pareja, interfiriendo con su capacidad de tomar decisiones propias de su cuerpo y el cuidado de su salud, lo que pone en riesgo tanto su salud como su seguridad”, apunta.
En relación con la violencia política por razones de género, el documento expone que todas las mujeres tienen el derecho al acceso igualitario a las funciones públicas de su país y a participar en los asuntos públicos, incluyendo la toma de decisiones, de acuerdo con lo que señalan los tratados internacionales.
En ese sentido, detalla que la violencia política contra las mujeres es un fenómeno que ha existido siempre, pero que empezó a visibilizarse y a denunciarse hace poco tiempo, siendo uno de los principales obstáculos para el ejercicio de los derechos políticos de las mujeres, porque el aumento de su participación y representación política ha estado acompañado de un incremento de la violencia en su contra.
Con estas reformas aprobadas por la LXIII Legislatura se garantiza la prevención, atención, sanción y erradicación de estos tipos de violencia contra más de la mitad de la población guerrerense, contribuyendo a su desarrollo integral y pleno bienestar.