Autoridades cubanas elevaron a 22 muertos y unos 64 heridos el saldo que dejó una fuerte explosión de origen desconocido que destruyó el emblemático Hotel Saratoga, en el centro de La Habana, Cuba.
El presidente Miguel Díaz-Canel aseguró que lo ocurrido se trató de un accidente, por lo que descartó que haya sido un atentado o sabotaje.
“No ha sido una bomba ni un atentado, es un lamentable accidente”, dijo al mismo tiempo que aseguró que los hospitales están atendiendo a todos los lesionados y se continúa trabajando en las actividades de rescate.
También informó que las fuerzas de rescate han tenido comunicación con una mujer que está atrapada en el sótano del hotel, donde se presume que pueda haber otros sobrevivientes.
Autoridades señalaron que se mantienen “los trabajos de búsqueda y rescate en el hotel, donde todavía es posible que haya personas atrapadas”.
“Se sintió un estruendo tremendo y una nube de polvo que llegó hasta el parque (de enfrente), mucha gente salió corriendo”, dijo a AFP Rogelio García, conductor de un bicitaxi que iba pasando justo en el momento de la explosión.
Las cuatro primeras plantas del Saratoga, hotel de cinco estrellas que cuenta con 96 habitaciones, dos restaurantes y una piscina en la azotea, saltaron por los aires en la explosión. El suelo quedó sembrado de escombros y cristales y varios automóviles fueron dañados alrededor, constató AFP.
La explosión se ha producido sobre las 10:50 de la mañana (horas locales) y provocó el derrumbe de parte del edificio, afectado también por un incendio que ha generado una gran columna de humo.
El edificio estaba vacío porque la reapertura estaba prevista para el próximo día 10.
Aunque dentro no había turistas, se trata de una zona muy concurrida por lo que no se descartan víctimas, aunque de momento no hay balance de daños personales.
Con información de agencias