Ovidio Guzmán se declara inocente de narcotráfico y lavado de dinero en Estados Unidos

  • Un tribunal en Illinois le acusa de cinco cargos en su primer encuentro con la justicia estadounidense

Ovidio Guzmán López se ha declarado inocente de los cincos cargos que se acusaban en la audiencia inicial de este lunes en una corte en Chicago, según informa Reuters. El hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, ha rechazado ser culpable de narcotráfico, lavado de dinero y uso de armas de fuego. El ratón, como también le llaman, fue extraditado de manera exprés el pasado viernes, cuando México llevaba a cabo las celebraciones por la independencia. Uno de los capos de Los Chapitos, la rama del Cártel de Sinaloa que dirigen los descendientes de El Chapo, fue detenido en Jesús María —un pequeño poblado enclavado en la sierra sinaloense— la madrugada del 5 de enero. El narcotraficante, de 33 años, ha sido señalado por las autoridades de Estados Unidos de inundar las calles de fentanilo, por lo que enfrenta múltiples cargos en al menos tres cortes.

La acusación hecha por la Fiscalía en Illinois apunta hacia El ratón; su hermano, Joaquín Guzmán López; y sus dos hermanastros, Iván Archivaldo Guzmán Salazar, Jesús Alfredo Guzmán Salazar. La investigación contra los herederos de El Chapo tiene por lo menos 15 años, en los que las autoridades han intentado documentar una conspiración “compleja y de largo plazo” para traficar drogas. “Se alega que los Chapitos obtuvieron y transportaron repetida y consistentemente cantidades de varias toneladas de cocaína desde y a través de América Central y del Sur”, señaló el Departamento de Justicia en abril pasado, cuando difundió las acusaciones contra los cuatro. Además se les acusa de haber colaborado en el trasiego de heroína, metanfetaminas y marihuana.

Puntualmente a Ovidio Guzmán se le acusa en esta corte de conspirar para distribuir droga, formar parte de una empresa criminal, exportar narcóticos de México a Estados Unidos, efectuar transacciones financieras con el dinero generado ilegalmente y portar armas de fuego ilegalmente. En abril pasado, Estados Unidos puso el ojo en Los Chapitos, a quien responsabilizó de una parte de la crisis de los opioides, a través del tráfico de fentanilo. “El Cartel de Sinaloa operaba como una afiliación de narcotraficantes y blanqueadores de dinero que obtienen precursores químicos —en gran parte de China— para la manufactura de drogas sintéticas, fabrican drogas en México, las trasladan a Estados Unidos y recolectan, lavan y transfieren lo que generan del narcotráfico”, ha señalado el Departamento de Justicia.

La audiencia de este lunes duró poco más de 15 minutos. De acuerdo a lo relatado por el periódico Chicago Tribune, Ovidio Guzmán se presentó con la vestimenta naranja característica de los presos, anteojos y estaba esposado de pies. El narcotraficante lucía cabizbajo, utilizó un traductor al español y dijo al juez que tomaba medicación para la depresión y la ansiedad, y que recientemente había sido operado del estómago, siempre de acuerdo a la versión del medio estadounidense. Le representa el abogado Jeffrey Lichtman, el mismo que defendió a su padre en el juicio en Estados Unidos. El tribunal le dio prisión sin permiso para salir bajo fianza y fijó la próxima audiencia recién para noviembre.

Consultado por la extradición, Andrés Manuel López Obrador ha asegurado este lunes que se debió a “un convenio de colaboración para extraditar a presuntos delincuentes” que tienen México y Estados Unidos. El presidente ha explicado que fue la Fiscalía General de la República (FGR) quien gestionó la extradición, “a solicitud del Gobierno de Estados Unidos”, y que lo hizo con la autorización de la Secretaría de Relaciones Exteriores, a cargo de Alicia Bárcena. “Tiene oportunidad de ampararse, acudir a un juez, en este caso no hubo, según entiendo, ninguna solicitud de amparo, y se procedió con la solicitud de extradición”, ha dicho el mandatario en su conferencia de prensa matutina.