- El Fiscal agregó que también se está revisando la eventual relación del asesinato con su actividad de cantante de narcocorridos, especialmente por temas alusivos al Cártel Jalisco Nuevos Generación.
Por Juan Carlos Huerta Vázquez
Guadalajara., 21 de septiembre.- El fiscal de Jalisco, Gerardo Octavio Solís Gómez, informó que la principal línea de investigación en torno al asesinato de Mario Lemus, hijo del diputado morenista Arturo Lemus Herrera, registrado el pasado domingo en el interior del cementerio Recinto de la Paz, en Zapopan, se debió a un altercado que tuvo con unos sujetos que se encontraban en otro funeral.
El Fiscal agregó que también se está revisando la eventual relación del asesinato con su actividad de cantante de narcocorridos, especialmente por temas alusivos al Cártel Jalisco Nuevos Generación.
Antecedentes
El hijo del diputado Morenista el jueves 16 de septiembre se retiraba del panteón después de visitar la tumba de un familiar, cuando se le aproximaron unos desconocidos a bordo de un vehículo en color rojo desde el cual le dispararon e inmediatamente después escaparon.
El joven de 20 años de edad, identificado como Mario Alberto, salía del parque funeral Recinto de la Paz, ubicado en la colonia Jardín Real en Zapopan, en el momento en que cuatro individuos le dispararon a quemarropa frente a varios familiares, el hermano del fallecido entró en crisis nerviosa tras el ataque.
Personal de la policía municipal se presentó en el panteón, localizado en las avenidas Aviación y Santa Margarita, donde constataron del hecho y establecieron un cerco de seguridad.
Se pudo saber que el joven era cantante de narco corridos, se pueden escuchar algunos de sus trabajos en plataformas como Mario Lemus y su código 7.
Entre sus temas destaca el tema “El Grande 7-7”, canción que en su letra alude a José Luis Gutiérrez Valencia, alias “Don Chelo”, quien era consuegro de Nemesio Oseguera, ‘El Mencho’, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación, también conocido como ‘El 77’ o ‘El Ojo de Vidrio’.
El lugarteniente era uno de los líderes del autogobierno en el complejo carcelario de Puente Grande en Jalisco, durante los cuatro años que estuvo en presidio.
En su reclusión se hizo famoso por la difusión de una fiesta ofrecida por él, ya que aparecía rodeado de guardaespaldas mientras otros presos bailaban y bebían a su lado con la música interpretada por los Buchones de Culiacán, -este conjunto musical es famoso por sus narcocorridos, incluso tocaba canciones en las que se elogia al jefe del CJNG-.